Plastilina hecha en casa y ¡comestible!

Se pueden hacer mil cosas con la plastilina, desde números, formas, letras, muñecos…de todo!! Es súper divertida para los peques y los no tan peques. Además no tienes que ir a comprarla ¡la tienes en casa!

Solo necesitas:
3 tazas (o partes) de harina
1 taza (o parte) de agua, caliente a poder ser.
1 taza de sal
1 cucharada de aceite de girasol
y colorante alimenticio para darle color a tu plastilina!
Ahora amasar y amasar hasta que no se pegue a los dedos, puedes añadir un poco más harina según veas tú. Los peques nos pueden ayudar a ´pringarse´ las manos con nosotros.


Después de jugar si nos queda algún trozo vivo, lo hemos de guardar en un contenedor o en film transparente donde no le dé el aire porque sino se secaría y no podríamos volver a moldear con ella. Se quedará gustosita y fresquita durante semanas.

Para realizar figuras sólidas sólo hay que darles formas y dejarla secar, por ejemplo la huella de la manita, un recuerdo que podemos tener para siempre, sin tener que comprar los kits que venden de escayola.
Ánimo! es muy divertido hacerlo juntos y siempre podrás presumir de que es ´hand made´!